Lo curioso es que todo lo hace sin una sola queja, ni siquiera cuando le dije que las migas no se dejan caer al suelo sino que se recogen en la mano. Los primeros días tenía que estar encima de ella diciéndole lo que tenía que ir haciendo. Ahora ya lo hace por sí misma sin que le diga nada.
Yo, mientras no me canso de mirarla como va cumpliendo con sus obligaciones orgulloso de mi hija.
Que bien, me alegra mucho que sea tan obediente y cumpla sus objetivos feliz, sois uns padres ejemplares. Besitos
ResponderEliminares estupendo que vaya teniendo sus obligaciones, pero es aún mejor que las haya asumido con gran responsabilidad. tienes una preciosidad de niña Fernando.
ResponderEliminarun abrazo
Es una gran niña y se esta haciendo mayor!!
ResponderEliminarUn abrazo
Fernando, ¿es cierto que ahora sólo haces la cena en casa porque sabes que así te escaqueas de recoger en las otras comidas?
ResponderEliminarAHora en serio. Me parece no sólo bien lo que hacéis, sino las pistas tan buenas que das para otros padres.
Gracia y un fuerte abrazo.
me alegro un monton de los avances de Cristina hacia esa independencia. en la foto está guapisima.
ResponderEliminarBuenos días Fernando. He recordado lo orgulloso que estaba mi padre cuando cumplía con lo que debía sin tener a nadie detrás, estudios, etc. y me lo mostraba. Necesitamos saber que están contentos con nuestro pequeño trabajo y aprender a valorar el de todos en la familia.Un abrazo.
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